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martes, febrero 14, 2006

Los recuerdos pueden ser alterados con medicamentos


Ser atacado, violado, vivir un atentado terrorista o tener un grave accidente de coche puede dejar recuerdos indelebles en nuestra memoria. Estos recuerdos suelen producir lo que se denomina trastorno por estrés postraumático o TEP, cuyas consecuencias se prolongan en el tiempo, provocando en los que lo padecen ansiedad, ataques de pánico o pesadillas.

Ahora, un medicamento utilizado tradicionalmente para la hipertensión está siendo probado por especialistas estadounidenses porque es capaz de disminuir el nivel de hormonas de estrés generado tras una situación traumática. Al disminuir dicho nivel es posible, según estos investigadores, que estos recuerdos tan radicales queden archivados en el cerebro con menos fuerza, lo que permitiría a los pacientes convivir con ellos. Aunque la investigación todavía no ha concluido, según sus artífices es posible incluso que el trauma desaparezca varios años después del shock.

El origen del trastorno por estrés postraumático o TEP ha sido estudiado sobre todo en lo que se refiere a los accidentes de tráfico y a las agresiones sexuales, por ser ambas situaciones las que más suelen afectar a los habitantes de los países desarrollados.
El TEP afecta a alrededor de un 22% de las víctimas de accidentes de circulación y casi a un 95% de las víctimas de violaciones o abusos sexuales. Éstas últimas pueden verse afectadas por este síndrome durante casi dos décadas sin que los efectos remitan.

¿Qué hacer con este tipo de recuerdos tan negativos? La investigación en el área de tratamiento del TEP siempre ha sido difícil y compleja. Los recuerdos traumáticos suelen ser considerados como pensamientos intrusivos, y se han considerado a lo largo del tiempo diversas terapias, como la terapia cognoscitiva, el manejo de la ansiedad, la psicoeducación o la terapia del juego, en el caso de los niños.

Desde hace unos años, además, se viene intentando un tratamiento que pueda paliar los efectos desde el punto de vista médico o químico. Desde esta perspectiva está trabajando un psiquiatra de la universidad de Harvard, en Estados Unidos, llamado Roger Pitman. Ya en el año 2004, esta misma universidad publicó un comunicado en el que se hablaba del trabajo de Pitman, aunque se adelantaba que serían necesarias nuevas pruebas para definir el alcance y las posibilidades de un medicamento denominado propranolol , que ayuda a suavizar los recuerdos derivados de situaciones traumáticas, con graves implicaciones para la integridad física de las personas afectadas.

Ahora, según informa The Guardian , Pitman ha demostrado que suministrar ciertos medicamentos a las víctimas de un trauma en el momento en que son internadas en un hospital tras sufrir la situación traumática evita que se desarrolle el TEP.

Según Pitman, es posible incluso que el trauma desaparezca durante años tras el shock. Su método médico permite seleccionar y alterar, gracias a determinados medicamentos, la manera en que los recuerdos son guardados en nuestras mentes.

Continúe leyendo el artículo de Marta Morales en Tendencias 21.